Actualmente, existen formas de financiación que no suman en la CIRBE (Central de Información de Riesgos del Banco de España).
Estas nuevas alternativas no suponen un crédito o un préstamo para una empresa, sino que son otras opciones de financiación, que ofrecen entidades no bancarias para obtener liquidez de forma inmediata.
Algunos de los productos financieros que puedes elegir sin que supongan un crédito para una pyme son el factoring o el descuento de pagarés.
En el caso del factoring, lo que se contrata con un tercero, es la cesión de cobro de las facturas. Es decir, una empresa cede a un tercero la gestión del cobro de sus facturas, de manera que esta entidad de gestión adelanta a la empresa el importe de dicha factura, además de encargarse de gestionar el cobro con los deudores.
De esta manera, la empresa consigue liquidez inmediata sin la firma de ningún préstamo o crédito, y sin consumir CIRBE.
Financiación empresarial tradicional o no tradicional
La financiación tradicional con entidades bancarias ha estado muy arraigada en nuestro país, siendo la más utilizada por las empresas españolas, y llegando a capitalizar casi toda la oferta del mercado.
Pero existen otras alternativas diseñadas para un nuevo mercado no tradicional y que no sumarán CIRBE y que son importante conocer.
El despegue de estas nuevas opciones de financiación, se debe principalmente a la crisis financiera de España, ya que, muchas empresas han vivido una etapa de alto riesgo debido a la dependencia de financiación que tienen de los bancos y la posición de mercado más vulnerable.
Por ello, los expertos y economistas recomiendan a las empresas diversificar parte de la financiación bancaria hacia nuevas soluciones menos tradicionales y que están fuera de la CIRBE, para no ser tan dependientes de las entidades financieras.
Si observas otros países como EE.UU., la financiación empresarial se compone en un 70% de origen no bancario y un 30% de origen bancario.
Por tanto, cabe al menos reflexionar porque en nuestra economía el 70% está en origen bancario y el 30% en no bancario, sin optar por diversificar las líneas de crédito, descuentos comerciales o préstamos a corto plazo hacia soluciones no tradicionales.
Soluciones para diversificar la financiación empresarial
Actualmente, la oferta del mercado no tradicional es amplia, así que en función de las necesidades de cada empresa o pyme, encuentras una oferta con soluciones más adaptadas a ellas.
Los operadores no tradicionales de financiación ofrecen una gestión online, rápida, sencilla, con precios competitivos y buen servicio al cliente.
Por ejemplo, las líneas de descuento oscilan entre el 3% y el 14% TIN, en función del riesgo del librado y del volumen de negocio, aunque llegan a asumir riesgos concursales. Sin embargo, el factoring presenta al mercado con unos costes de alrededor del 2% TAE, con anticipo de dinero y fuera de la CIRBE.
Entre las ventajas que ofrece la propuesta no tradicional a financiar la cartera comercial son las siguientes:
- Estudio del riesgo del cliente.
- Opción a anticipos individuales sin suscribir una línea.
- Descuentos para cedentes en concurso de acreedores.
- No suman CIRBE.
- Sin límite de importe o sector.
- No hay gastos de estudio.
- No están obligados a factorizar toda la cartera del cliente.
Servicios Factoring: financiación no tradicional
Cuando una empresa acude a contratar los servicios de factoring persigue tres objetivos claros. El primero, conseguir liquidez, el segundo, ampliar su capacidad de financiación, y, por último, mejorar los ratios de endeudamiento.
Una de las ventajas de factoring es que no tienes que esperar a la fecha de vencimiento de las facturas para obtener liquidez. Así puedes continuar con la actividad empresarial afrontando todos los gastos de la misma y consiguiendo una mayor eficacia en la gestión de cobros de las facturas emitidas.
El factoring permite estar al día en los pagos que realiza la empresa, ya que, con el adelanto del importe de la factura, dispones de la liquidez suficiente para cumplir con tus obligaciones como cliente de otra empresa.
En definitiva, con el servicio de factoring aportas tranquilidad a la empresa, manteniendo un equilibrio en caja. Además te garantiza una mejor gestión del tiempo, al no tener que dedicarnos al cobro de las facturas de los clientes, pudiendo dedicar esos recursos a otras tareas empresariales o inversiones necesarias que generen una mayor productividad.
Este tipo de financiación se está extendiendo con rapidez en los últimos años, a la hora de conseguir liquidez para una empresa, porque proporciona seguridad, evita desplazamientos a la entidad financiera, sin intereses, no suma CIRBE, etc., es una garantía de cobro total y una financiación muy rentable.