A pesar de vivir en un mundo globalizado seguimos tendiendo a pensar que nuestros problemas solo son nuestros. Pero las empresas que se dedican a trabajar para clientes de otros países saben que el problema de los impagos es un mal que afecta a las economías de otros países también.
Curiosamente, España es el único país de la Unión Europea que no tiene una regulación explícita para la reclamación de deudas extrajudicialmente, por lo que las agencias de recobro operan en muchos casos en terrenos inciertos. La mejor solución para defenderse de impagos en España sigue siendo contar con plataformas online como Triniom, donde poder asegurar el cobro de una factura independiente o de todas las facturas de un mismo deudor.
Pero como estábamos explicando, en otros países el problema no es menor. De hecho, en los países de nuestro entorno consideran a las empresas españolas como “buenas pagadoras”. También hay que mencionar que en otras regiones fuera de la UE donde la seguridad jurídica es menor los índices de impago son mayores y tienen mal remedio.