En este artículo vamos abordar el desafío de implantar la facturación electrónica, además de analizar los beneficios que aporta al crecimiento tecnológico en España.
Actualmente, el proceso de implementación de la facturación electrónica se encuentra en una etapa de cumplimiento voluntario para la gran mayoría, pero está tan solo a un paso de que se convierta en obligatorio.
Este paso supondrá para empresas y para la Administración Tributaria un importante esfuerzo, con el fin de establecer cómo será el nuevo procedimiento, teniendo en cuenta todos los tipo de empresas y los diferentes sectores que hay en la economía española.
Desafíos para adaptarse a la facturación electrónica
El primer reto para que las empresas se adapten a la facturación electrónica es contar con la tecnología suficiente para ello.
Una vez entre en vigor y sea obligatoria, habrá que contar con la automatización de los procesos internos, aumentar la capacidad de los servidores y desviar partidas económicas para ofrecer ciberseguridad, todo ello, dentro del plazo que establezca la nueva normativa.
Esto requiere un desarrollo interno y de autogestión por parte de las empresas, además del apoyo de proveedores externos, lo cual, dependerá del estado de madurez del sistema de facturación actual y registros contables usados por cada tipo de empresa.
Además, la identificación de los procesos conllevará a adaptaciones especiales, según el ciclo económico de las operaciones y transacciones.
Por tanto, los mayores retos para adaptarse a este sistema de facturación electrónica, por parte de las empresas, son:
- Temor a que dicha adaptación les lleve mucho tiempo, sobre todo la migración del sistema actual al de facturación electrónica.
- El cumplimiento de la normativa multinacional, ya que, la diversidad de requisitos, incluso dentro de la Unión Europea, son complejos.
- Dependiendo de la estructura de la empresa, algunos departamentos estarán implicados directamente en este sistema de facturación, como son el de finanzas y contabilidad que serán los más afectados.
- La seguridad de los datos y su almacenamiento.
¿Qué oportunidades ofrece a una empresa la facturación electrónica?
Para conseguir los desafíos que establece el sistema de facturación electrónica, los proveedores de servicios han creado herramientas avanzadas para clientes nacionales e internacionales, consiguiendo priorizar la incorporación de clientes o proveedores, además del convencimiento del uso de este sistema a los que se opongan.
Una oportunidad que traerá este sistema a las empresas es la colaboración con proveedores experimentados, con el fin de garantizar el cumplimiento legal de las diversas normativas existentes a nivel mundial.
Si analizamos los procesos internos de una empresa tras la implantación de la facturación electrónica, aunque al principio no lo parezca, conlleva a un ahorro significativo. Ahora bien, para que esto ocurra, el proyecto debe ser supervisado a nivel ejecutivo para que determine las prioridades e involucre los departamentos necesarios, consiguiendo la integración de todos los datos de forma completa y fiable, y, por supuesto, mejorando la toma de decisiones.
Actualmente, hay empresas de tamaño semejante y con un perfil de negocio parecido, que han optado de forma voluntaria implantar el sistema de facturación electrónica en su operativa. Pues bien, en todas ha resultado un éxito, ya que han conseguido grandes ahorros económicos, principalmente, cuando el negocio se ha expandido o han ampliado su cartera de clientes y proveedores.
Con el panorama actual, es necesario que todos los responsables o empresarios comiencen a pensar en la facturación electrónica, modificando la operativa de la empresa hacia un camino más tecnológico.
Por tanto, el sistema de facturación electrónica busca mejorar la competitividad de las empresas, disminuyendo costes, cuidando el medio ambiente, aumentando la eficiencia y efectividad de la empresa, permitiendo tener la información en la nube y, siempre a disposición del empresario.
Su implementación nos permite obtener procesos eficientes en registros contables y legales, además de ser necesaria para seguir sus operaciones, ya que, habrá otras empresas que sí están obligadas a facturar, y, por esta razón, ellos exigirán la facturación electrónica para poder cruzar información.
Hay que tener en cuenta que una empresa no puede dejar de perder una venta por no estar facturando electrónicamente.
Por ello, este proceso de adaptación evidencia múltiples beneficios tan simples como los que permiten a la empresa tener una mayor organización, en un sentido de responsabilidad y compromiso, además de conseguir estar en constante actualización, según la normativa que corresponde a la facturación electrónica.
Nuestras recomendaciones para aquellas empresas que ya estén obligadas a facturar electrónicamente es que acaten las normas que emite este sistema, porque cuando todas las empresas se incorporen a este sistema de facturación de forma obligatoria, se conseguirá luchar contra el fraude de forma global y eliminar la manipulación de documentos oficiales.